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sábado, 1 de febrero de 2020

Jacinto Rafael Pérez Arcay. Perfil biográfico


Jacinto Rafael Pérez Arcay (La Vela de Coro, Falcón – 15/02/1932 - Caracas 20/09/2021) fue un militar, historiador, escritor y docente venezolano, Jefe Honorario del estado mayor de la comandancia en jefe de la Fuerza Armada Nacional de Venezuela, quien fuera mentor y asesor del expresidente venezolano Hugo Chávez. Fue hasta su muerte el militar activo de mayor edad en Venezuela y es asesor en temas históricos militares y geopolíticos de Nicolás Maduro Moros.

Biografía

Jacinto Pérez Arcay nació en la Vela de Coro, presumiblemente el 15 de febrero de 1932 (las fuentes consultadas no coinciden en este dato, otra fecha posible es el 06/02/1934), sin embargo, debido a la muerte de su madre, fue llevado junto a sus tres hermanas a vivir con sus abuelos en Juan Griego, estado Nueva Esparta, cuando tenía un año de edad.

Allí creció bajo la tutoría de su abuela y desde temprana edad se interesó por la lectura, teniendo contacto con la obra de Alejandro Dumas, El Conde de Montecristo, a los 7 años de edad, novela que leyó a su abuela en voz alta hasta tres veces, así Pérez Arcay tendría sus primeros contactos con la historia así como con la complejidad de las relaciones humanas.

Jacinto Pérez Arcay tiene un hijo que siguió sus pasos incorporándose a las fuerzas armadas nacionales, José Gregorio Pérez Malavé (04/11/1968), quien hasta el año 2017 era General de División. Según contó Hugo Chávez en su blog, otro hijo de Pérez Arcay “estaba en mi batallón el 4 de febrero, el día de la rebelión. Así que uno de sus hijos fue a prisión, Luis Rafael. Pérez Arcay iba mucho al batallón; tenía dos hijos en el Cuartel Páez de Maracay. Hace años le nació un varón, ¿saben qué nombre lleva? ¡Jesús!; y hace otros tantos una niña que yo conocí, se llama Bolívar y le decimos “Bolivita”.

Carrera Militar

Jacinto Rafael Pérez Arcay estudió en la Academia Militar en donde se graduó de Alférez, el 5 de julio de 1956, siendo séptimo en la promoción General de División Jacinto Lara, ingresando al ejército como oficial de artillería.

Posteriormente, comenzando su carrera como oficial, entre finales del año 1957 y enero de 1958, Pérez Arcay formó parte del alzamiento militar comandado por el Coronel Hugo Enrique Trejo, y que explotó el 1 de enero de 1958. Este movimiento, en el que participaron guarniciones de Caracas y Maracay, debió tener el respaldo determinante de la Aviación, sin embargo, deserciones de último momento derivaron en su fracaso. Su puesta en marcha tuvo que adelantarse al menos cinco días porque el plan golpista había sido delatado y las acciones represivas estaban avanzando, encarcelando a varios de los involucrados.

Años después, un retirado Hugo Trejo detalló en su libro “La Revolución no ha terminado” las acciones llevadas a cabo durante la rebelión, exponiendo la labor de Pérez Arcay en el alzamiento. Hugo Trejo escribió en su libro que “desde el Cuartel Páez salieron las comisiones a cumplir con lo ordenado en la reunión del Cuartel Sucre” el 31 de diciembre. Al para entonces sub-teniente Jacinto Pérez Arcay (grado que equivale al actual primer teniente) al mando de un pelotón, se le comisionó detener al comandante de la Guarnición, el Coronel Amable Martínez, y al gobernador del estado, y a Pérez Arcay se le unió el Capitán José Agustín González, quien tenía la misión de tomar la Seguridad Nacional y poner en libertad a los presos políticos, misión que fue cumplida a cabalidad. Jacinto Pérez Arcay estuvo preso los primeros 23 días de 1958 por formar parte de los alzados comandados por Trejo, permaneciendo detenido hasta la caída del régimen de Marcos Pérez Jiménez.

Jacinto Pérez Arcay se reincorporó al estamento militar llegando a ser oficial de artillería, hasta ocupar el puesto de general de brigada en su retiro de una primera etapa en las fuerzas armadas venezolanas.

Pérez Arcay también fue instructor de la Academia Militar en los años setenta, en los cuales impartió clases de matemáticas, geopolítica, historia militar, cátedra bolivariana, moral militar, castellano y literatura, escalando hasta el cargo de director académico de la academia militar.

Cuando estaba ocupando este último cargo, en el año 1974, los alférez iban los fines de semana para recibir conferencias en la cátedra de la Sociedad Bolivariana de Venezuela. Es allí donde conoce a un muy joven Hugo Chávez, a quien le toca proteger de una posible expulsión de la academia militar, por una disputa en donde el futuro presidente defendía la memoria de Simón Bolívar, quien estaba siendo tildado de tirano.

Jacinto Pérez Arcay pudo haber sufrido de discriminación profesional durante su primera etapa en las fuerza armadas. Mientas los gobiernos de la época ascendían cada año a decenas de militares, Pérez Arcay no pasó de general de brigada. Ni los años de servicio, ni sus labores como instructor de la academia militar, ni su preparación académica le ayudaron. Mucho menos su posición contraria a las formas como se manejaban los gobiernos de la llamada cuarta república (1958-1999), los cuales consideraba eran la misma dictadura contra la cual se reveló en 1958, pero con otros nombres en el poder.

Posteriormente, varios años luego de su retiro, Pérez Arcay fue reincorporado al servicio activo por el para entonces presidente Hugo Chávez Frías, quien le ascendió al rango de General de División, ascenso que se oficializa el 5 de julio del año 2007, en la resolución 003999 del Ministerio del Poder Popular para la Defensa. Desde entonces, Hugo Chávez se dedicó a la tarea de conformar un Estado Mayor de la Comandancia en Jefe de la FANB, un órgano de planificación y asesoramiento estratégico operacional, posición para la cual Pérez Arcay ya estaba perfilado.

Unos años luego, Pérez Arcay preguntaría a Hugo Chávez si estaba seguro de esos ascensos, que lo convirtieron en el oficial activo de mayor edad en la Fuerza Armada. “¿Y por qué no, si su hijo es el comandante en Jefe?”, fue la respuesta del presidente venezolano.

Cinco años después, el 22 de febrero de 2012, Pérez Arcay era nuevamente ascendido al grado de Mayor General de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, , ascenso oficializado en la resolución N° 021590, del Ministerio del Poder Popular para la Defensa, publicada en la Gaceta Oficial N° 39.868. El anuncio del ascenso lo había hecho el mismo presidente Hugo Chávez, el 15 de febrero de 2012, día del cumpleaños 80 de Pérez Arcay, en un acto conmemorativo de los 193 años de la instalación del Congreso de Angostura, realizado en el estado Bolívar.

El 11 de julio de 2019, el presidente Nicolás Maduro designó a Jacinto Pérez Arcay Jefe Honorario del Estado Mayor de la Comandancia en Jefe. El General en Jefe acompaña en este ente de las fuerzas armadas al MG Jesús Suárez Chourio, en sus funciones como Jefe del Estado Mayor de la Comandancia en Jefe. El ascenso se oficializó en el Decreto Nº 3.909 de fecha 10 de julio de 2019, publicado en la Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela N° 41.671

Maestro de Hugo Chávez

Jacinto Pérez Arcay es conocido por haber inspirado ideas revolucionarias y pasión patriótica al joven cadete Hugo Chávez, a quien conoce desde su paso por la Academia Militar, donde le enseñó el pensamiento de Ezequiel Zamora y Simón Bolívar. Ya siendo presidente, Hugo Chávez le tuvo como asesor político y de historia militar, con una oficina en el mismo palacio de Miraflores. Chávez habla en los llamados “Cuentos del Arañero” de los discursos dados por Pérez Arcay a la “muchachada de los 70”. “Desde sus tiempos de teniente coronel –éramos nosotros imberbes cadetes– nos hablaba en el Patio de Armas: “Muchachos, Bolívar; muchachos, Sucre; muchachos, Miranda; muchachos, Zamora; ahí está la raíz de ustedes, muchachos militares del siglo XXI”, expresa Hugo Chávez en su blog con decenas de anécdotas biográficas hoy recopilado en un libro.

Fue Pérez Arcay quien le defendió en un pleito que hubo entre Hugo Chávez, cuando era cadete, y su alférez mayor, Alcides Rondón Rivero, luego de una conferencia en la casa natal de Bolívar, en la que Rondón Rivero dijo que Bolívar era un tirano y Chávez le defendió apasionadamente desobedeciendo las órdenes de su alférez mayor de callar y tomar asiento, ganándose una posible expulsión, pero Pérez Arcay, siendo director académico, abogó por el joven bolivariano y lo conminó a seguir estudiando a Bolívar y Zamora.

Chávez hizo mención de él como “uno de mis maestros, general venezolano, filósofo”… “me dio clases cuando yo era cadete de 17 años, sobre historia, filosofía, siempre le admiré y le he admirado”…, “hoy en día es uno de mis asesores; lo llamé, se reincorporó al ejército”.

En los “Cuentos del Arañero”, Chávez escribe: "Mi general Pérez Arcay nos conoció el alma a la muchachada militar de los '70". “Me gustaba hablar con él. Ya tenía el pelo blanquito; era un hombre impecable, pulcro, que me hablaba del proyecto nacional, de Bolívar, de cómo los adecos traicionaron la democracia y cómo lo echaron a él de las fuerzas armadas.”

Después del fallido golpe de estado del año 1992, Hugo Chávez cae preso, y Pérez Arcay le va a visitar en la cárcel. Así lo cuenta Hugo Chávez en un capítulo de los “Cuentos de Arañero” que le dedicó a “Mi General Pérez Arcay”, Chávez escribe: “A Yare fue una vez a vernos en prisión. No lo dejaron entrar y se quedó parado de plantón. Le dijo a un oficial: “Capitán, soy el general Pérez Arcay, como no me dejan entrar, vine a pagar plantón frente a mi comandante Chávez, que está allá adentro”. Aquel general se paró dignamente debajo del sol durante tres o casi cuatro horas, pagando un plantón ahí, llevando sol frente a Yare, como espiando cosas. Es uno de nuestros grandes maestros: Jacinto Pérez Arcay”.

Era 1994, “yo salía de prisión (cuenta Hugo Chávez), tenía 39 años y me buscó, me buscó y me consiguió y me dijo: yo solo te quería conseguir porque yo te quería decir algo: aunque tú no lo quieras, aunque tú hicieras lo que hieras para evitarlo, tú vas a ser presidente de este país. Entonces me dijo: así que tienes que hacer muchas cosas entre otras estudiar mucho, y me dio una caja de libros y me dijo, pero tienes que ponerte viejo antes de tiempo; estás obligado a madurar antes de tiempo. Nunca olvidaré en mi vida ese consejo. Es madurar, madurar antes de tiempo; ponerse viejo antes de tiempo”.

Walter Rodríguez recuerda que Pérez Arcay recomendaba y compraba libros para el barinés. "Cuando el Presidente comenzó a viajar a Rusia, China y otros países, Pérez Arcay me llamaba y yo le preparaba paquetes de libros sobre el país, unos diez o doce, con textos y fotos, que luego quedaban en la biblioteca de Palacio".

El mayor general Pérez Arcay fue quien escribió la carta que Chávez suscribió y envió a Carlos Ilich Ramírez en 1999 y que generó una polémica que aún se mantiene.

El crucifijo que blandió Hugo Chávez el 14 de abril, en su triunfal retorno al poder, se lo dio el general Pérez Arcay. Con él en sus manos, el Presidente llamó al país a reconciliarse y a los dueños de los medios a reflexionar.

El escritor German Sánchez Otero reunió las memorias de quienes estuvieron presentes en el palacio de Miraflores durante el golpe de estado de abril del 2002 y describe en el libro “Abril sin censura, Golpe de Estado en Venezuela” los detalles de la entrega del crucifijo a Chávez. “José Vicente, que junto a los demás ministros se encuentra en el despacho muy próximo al Presidente, comenta en su estilo lacónico: «Si no hay renuncia, esto es un golpe de Estado». Y en ese instante al general retirado Jacinto Pérez Arcay le viene a la mente una frase en latín: Verba volant, scripta manent (Las palabras vuelan, lo escrito permanece). Este hombre de casi setenta años, que había sido profesor de Chávez en la Academia Militar, bolivariano de estirpe, tiene su oficina al lado del Presidente, y cuando ve que su discípulo se despide en calidad de preso, va hacia allí y busca un crucifijo suyo de origen italiano, una cruz azul muy sencilla de bordes nacarados. Regresa junto al Presidente y espera a que consuele a la ministra Ana Elisa Osorio, el profesor Pérez Arcay se le acerca con ternura de padre y le pone el crucifijo en las manos: “Hijo, llévate a Cristo”. Y Chávez lo ilumina: “Mi general, al regreso hablamos, al regreso hablamos...». Así Pérez Arcay supo que su mejor alumno tenía la certeza de que volvería.”

En algunas cosas, Chávez y Pérez Arcay estaban en desacuerdo. A Chávez le gustaba El general en su laberinto, de Gabriel García Márquez. A Pérez Arcay, no. Ese que pinta García Márquez no es Bolívar. Lo que él escribe está muy bien, tiene un bello estilo, pero Bolívar queda como un atorrante.

Maestro, historiador y escritor

La vocación por la escritura de Pérez Arcay la habría puesto en práctica desde el año 1972, cuando presentó su tesis de curso de Estado Mayor (Escuela Superior del Ejército de Venezuela) con título La Guerra Federal: consecuencias, investigación que posteriormente convirtió en el libro con el mismo nombre (1974).

Varias fuentes coinciden en difundir que Pérez Arcay es graduado summa cum laudeen historia y geografía de la Universidad Católica Andrés Bello. A estos temas les ha dedicado su vida como docente, investigador y escritor, siendo maestro de centenares de oficiales, habiendo publicado numerosas investigaciones que constituyen referentes para los estudiantes y académicos que se acercan al pensamiento de Simón Bolívar y a las contiendas que agitaron la vida del país a principios del siglo XX.

En su rol de historiador, Pérez Arcay ha sido uno de los principales estudiosos de la Guerra Federal. Uno de sus primeros libros se titula Guerra Federal. Consecuencias (tiempos de geopolítica) y contiene una reivindicación de la figura del general de hombres libres, Ezequiel Zamora. Este libro en su momento, 1977, era un planteamiento revulsivo, en especial porque su autor era, por entonces, coronel del Ejército.

Pérez Arcay es autor de los siguientes libros:
  • Monografía Soldado presente. Oficina Técnica del Ministerio de la Defensa. (1969)
  • La Guerra Federal: consecuencias (1974)
  • El Fuego Sagrado, Bolívar hoy (1979)
  • La Guerra Federal. Péndulo Histórico Bolivariano (1982)
  • El Fuego Sagrado: Contribución al estudio sobre el Monumento a Bolívar en la cumbre de "El Ávila" (1999)
  • La personalidad Bolívar: contribución al estudio sobre el monumento a Bolívar en la cumbre de "El Ávila" (2001)
  • Cristo y Bolívar Manantial de Vida del Socialismo del Siglo XXI. Fundación Editorial El perro y la rana- Ministerio de la Cultura. (2009)
  • Carabobo, un Punto Itinerario. Corporación Venezolana del Petróleo (2011)
  • Hugo Chávez, El Alma de la Revolución Pintada en el Papel. Fundación Editorial El perro y la rana- Ministerio de la Cultura (2012)
  • Hugo Chávez, El Alma de la Revolución Pintada en el Papel Volumen II. Fundación Editorial El perro y la rana- Ministerio de la Cultura. (2013)
  • Algunas fuentes indican que Pérez Arcay presidió la comisión encargada de elaborar el documentario de la libertad, la cual se trata de 56 volúmenes pertenecientes a la Biblioteca Bicentenario de Simón Bolívar

    "Llegaste muerto"

    En el año 2013 Pérez Arcay fue motivo de controversia cuando expresó que Hugo Chávez que “había llegado muerto de Cuba”, durante las exequias del ex presidente. Luego declaró que se trataba de una metáfora con la figura de Pedro Camejo. En 2016 dejó entrever que para él, la muerte de Hugo Chávez había sido un asesinato: “la muerte de Chávez forma parte de un constructo hipotético, tal vez pensado en el Departamento de Estado de EE UU. Hay una responsabilidad histórica en el asesinato de Chávez, porque tumbó los Tratados de Libre Comercio, le dio duro donde ellos eran más débiles en su pasión por el dinero”.

    Otras distinciones

  • 2014. Recibió el Doctorado Honoris Causa en Seguridad y Defensa y Seguridad de la Nación por parte de la Universidad Militar Bolivariana de Venezuela
  • En 2016 le fue conferida la distinción “El Gran Cordón de Caracas”.

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