El suplente de la diputada forma parte de la bancada del oficialismo.
ENDER MARCANO | EL UNIVERSAL
Un salto de talanquera no será necesario para aprobar la Ley Habilitante, que aún no ha solicitado el Presidente Nicolás Maduro, pero que se espera llegue algún día a la Asamblea Nacional. De producirse el allanamiento de la inmunidad parlamentaria de la diputada María Aranguren (Independiente- Monagas) el Partido Socialista de Venezuela (PSUV) sumaría un nuevo voto de la mano del diputado Carlos Flores, suplente de Aranguren y quien forma parte del partido de gobierno.
El martes el Ministerio Público divulgó un comunicado en el cual informó que se estaba evaluando la posibilidad de solicitar al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) el antejuicio de mérito contra Aranguren por presuntos hechos de corrupción. Las irregularidades las habría cometido la parlamentaria cuando se desempeñaba como presidenta de la empresa Administradora Inmobiliaria Monumental de Maturín.
Si desde la Fiscalía se lleva la solicitud al TSJ y este da el visto bueno, quedaría de parte del Parlamento autorizar el allanamiento contra Aranguren, tal y como se hizo en el caso de Richard Mardo con mayoría simple, votos con los que cuenta el oficialismo.
María Aranguren fue electa en el 2010 por el PSUV, pero se separó de esta bancada el año pasado junto al entonces gobernador de Monagas, José "El Gato" Briceño. Mientras que Carlos Flores se mantiene en las filas del PSUV.
De esta forma la bancada opositora en el Poder Legislativo quedaría con 66 diputados, mientras que la bancada del oficialismo (que incluye al PCV) tendría los 99 votos necesarios para dar paso a la Ley Habilitante.