La tarde de este martes fue detenido el Vicealmirante de la Armada, en situación de retiro, Pedro Manuel Pérez Rodríguez en su lugar de residencia en El Marqués, en Caracas. La acción habría sido ejecutada por funcionarios de la Dirección de Contra Inteligencia Militar, algunos portando capuchas.
Durante el resto de ese día, los familiares del detenido no supieron de su paradero. Entretanto, el presidente Nicolás Maduro reveló esa noche que había sido capturado un militar retirado que sería cabecilla de un complot castrense para derrocarlo.
Pedro Manuel Pérez Rodríguez estuvo al frente de la Escuela Naval de Venezuela y luego fue Comandante de la Zona Operativa de Defensa Integral Nº32 (ZODI) y Comandante de la Infantería de Marina. En 2013, el alcalde del Municipio Vargas, Alexis Toledo, le impuso la orden al Mérito Manuel Gual y José María España, en su única clase, por su destacada trayectoria en la Fuerza Armada Bolivariana y aporte a la sociedad.
En 2014, siendo Comandante de la Infantería de Marina, envió a la entonces ministra de Defensa, Carmen Meléndez, y al entonces jefe del Comando Estratégico Operacional, general Vladimir Padrino López y a todo el alto mando militar naval, una denuncia sustentada con el testimonio del teniente de navío Wilmer Aguirre Antequera, integrante del batallón de comunicaciones del cuerpo de Infantería de Marina Felipe Baptista, sobre la actuación de personas identificadas como integrantes de las “Fuerzas Revolucionarias José Félix Ribas”, su dotación de equipos de comunicaciones y armamento y cómo incluso le ordenaban a la Policía Nacional Bolivariana cómo reprimir manifestaciones opositoras. Alertaba Pérez Rodríguez sobre la actuación de los colectivos, con amparo de los uniformados.
El 3 de abril de 2014, Pedro Miguel Pérez Rodríguez hizo la denuncia, además pasando un radiograma a sus unidades prohibiendo la participación de infantes de marina en la represión a las manifestaciones contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro. Su conducta lo obligó a separarse del cargo y pedir la baja. Fue sustituido por el vicealmirante Remigio Ceballos.
Desde entonces, ha seguido insistiendo sobre la actuación de los colectivos armados con amparo de las estructuras militares, así como otras irregularidades como la injerencia cubana en los cuarteles venezolanos, con oficiales de ese país en calidad de asesores del Comando Estrategico Operacional, según denunció a El Estímulo.
Esas denuncias las llevó ante la Asamblea Nacional, a donde fue convocado para rendir declaración, cuando también habló de irregularidades administrativas en la Fuerza Armada.
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