Psicóloga Carmen Elena Balbás considera “muy banal” hablar de pragmáticos y radicales. Cree que el debate gira en torno a seguir con el socialismo o replantear elmodelo. El experto Benigno Alarcón sostiene que a los pragmáticos les interesa más preservar el poder que el proyecto original
Por José Gregorio Martínez / La Verdad
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Lee aquí la carta pública del exministro Jorge Giordani
6 puntos clave de la carta de Giordani
La reacción en cadena que ha generado la carta del exministro Jorge Giordani, en la que critica decisiones en materia económica, pone de manifiesto las diferencias internas en el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), cuyo debate giraría en torno a la continuidad del socialismo o el replanteamiento del modelo original del fallecido presidente Hugo Chávez.
Benigno Alarcón, director del Centro de Estudios Políticos de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), considera que se está destapando la disputa interna entre los dogmáticos y los pragmáticos que existe en el partido de Gobierno.
“Están lo que reclaman el rescate del proyecto original de Chávez y se sienten representados en la carta de Giordani y está un grupo más pragmático que sabe que bajo el esquema original la economía no se puede sostener. Hay que recordar que el presidente Maduro dijo que si había que dar un giro se daría. A esta corriente pragmática, más que conservar el proyecto, le preocupa preservar el poder”.
Alarcón advierte que para dar este giro económico es necesario evaluar la viabilidad política, razón por la cual el jefe de Estado insiste en llamar a la disciplina y la lealtad. Subraya que el próximo congreso del PSUV podría convertirse en el campo de batalla para dirimir diferencias.
Carmen Elena Balbás, psicóloga social y profesora de opinión pública de la Ucab, considera “muy banal” hablar de pragmáticos y radicales. Aunque reconoce que “se ha generado una tensión con la carta de Giordani que ha puesto a la luz pública contradicciones internas del PSUV”, sostiene que el debate gira en torno a seguir con el socialismo o replantear el modelo.
Por encima de su opinión, Balbás sugiere tomar en cuenta a los articulistas de un espacio oficialista como Aporrea. Flavia Riggione, profesora e investigadora de la UCV, identificada con el oficialismo, habla allí del “efecto Giordani” como una oportunidad para realizar una investigación “profunda, honesta y transparente”, pero lamenta que la reacción haya sido opuesta.
Reacciones
Héctor Navarro. “¿Nos conformaremos con señalarlo como traidor (a Giordani) y en consecuencia no discutiremos la denuncia sobre la presencia del “grupo francés” y lo que se estaba negociando a espaldas de los intereses de la república?”.
Ana Elisa Osorio. “Exhortamos a la AN que desempolve la Ley contra la corrupción y se castigue a los corruptos: Esos son los grandes traidores a la Revolución”, dijo al tiempo que se solidarizó con Navarro.
Miguel Pérez Pirela. “Cometeríamos un craso error si nos sentamos y nos eternizamos en hablar mal de Giordani. Es decir, si hacemos ataques ad-hominen y no analizamos y hacemos hermenéutica exhaustiva, es decir, interpretación exhaustiva de lo que está allí escrito”.
Suspenden a Navarro
El exministro de Educación Héctor Navarro fue suspendido de la Dirección Nacional del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) tras apoyar públicamente a Giordani y pedir que se respondiera a las denuncias hechas por este.
La Dirección Nacional del PSUV decidió "mi pase al Tribunal Disciplinario del partido" y también el cese "inmediato en mis funciones como miembro del mismo, de manera que (...) hasta que yo sea juzgado adecuadamente, no represento formalmente a mi partido el PSUV", escribió Navarro en una comunicación pública.
El politólogo Nicmer Evans, allegado al Gobierno, criticó la decisión. "Cinco meses sin reunirse la Dirección Nacional del PSUV. Hoy (ayer) lo hacen para suspender a Navarro formalmente. No hay debido proceso".
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