El gobierno de Nicolás Maduro compró un millonario publirreportaje en el diario estadounidense para contar su versión de la crisis fronteriza.
MSN NOTICIAS / Fotomontaje Semana.com
Muchos se han indignado con este artículo pagado, pues mientras en Venezuela escasean los productos básicos de la canasta familiar, el gobierno paga páginas de publicidad en el diario más importante de Estados Unidos que cuesta por lo menos 100.000 dólares, según fuentes cercanas a la prensa estadounidense. La cifra alcanza alrededor de Bs 19.900.000 a la tasa oficial Simadi.
Gobierno intenta explicar "La Verdad"
“Colombia se ha visto devastada por 50 años de guerra civil, lo que ha traído problemas de seguridad para Venezuela a lo largo de la frontera”. Con esas palabras abre un publirreportaje de una página que pagó el gobierno de Venezuela al diario más influyente de Estados Unidos y uno de los más respetados del mundo.
El artículo, publicado en la versión impresa del New York Times de este miércoles, se titula ‘La verdad sobre la situación fronteriza entre Colombia y Venezuela’ (The truth about Venezuela-Colombia border situation) y en él se cuenta la versión que el gobierno venezolano quiere venderle a la comunidad internacional.
Según el texto, los efectos del conflicto colombiano, que incluyen tráfico de drogas, violencia paramilitar y desplazamiento forzado, se han esparcido a lo largo del hemisferio. A pesar de esto, bajo los gobiernos de Hugo Chávez y Nicolás Maduro, Venezuela ha jugado un rol crucial en la búsqueda de paz y en las liberaciones de secuestrados, dice el texto.
“Venezuela se ha visto forzado a tomar medidas constitucionales extraordinarias cerrando una parte de la frontera con el propósito de defender a sus ciudadanos. Serias amenazas a la seguridad económica y nacional han crecido en los últimos años, como el paramilitarismo, narcotráfico y la proliferación de prácticas ilegales como contrabando de gasolina, comida, medicina y otros productos básicos, así como manipulación de las divisas que afectan las condiciones de la población”, dice el publirreportaje.
Nuevamente, pese a estos problemas, el país vecino asegura seguir comprometido con el proceso de paz y con el bienestar y los derechos humanos de los refugiados, inmigrantes y ciudadanos.
Luego el ‘editorial’ desarrolla cinco puntos brevemente: ‘Amenazas a la seguridad ciudadana y económica: violencia paramilitar’, ‘Contrabando’, ‘Manipulación de divisas’, ‘Medidas tomadas por el gobierno venezolano’ y ‘Colombianos en Venezuela: una historia de paz e integración’.
Ahí registran el caso de los tres militares de la guardia bolivariana que fueron asesinados y el caso del congresista Robert Serra, quien supuestamente fue asesinado por el paramilitarismo colombiano. También habla de las cantidades de contrabando de gasolina, maíz, arepas, entre otros. Según el texto, el 80% de los productos que llegan a Cúcuta son de contrabando y el cierre de la frontera le ha ahorrado al gobierno unos 260.000 galones de gasolina diarios.
En el publirreportaje también se asegura que el gobierno venezolano ha llamado a sus homólogos colombianos para desarrollar una estrategia conjunta en la zona fronteriza y convertirla en un “área bolivariana de cooperación”, como la ha llamado el presidente Maduro.
En el mismo sentido, se dice que tras la declaración del estado de excepción se ha logrado la captura de 32 presuntos paramilitares, desmantelar una red de prostitución donde menores de edad eran explotados, descubrir una fosa común donde había 13 cuerpos. Según el artículo, el cierre de la frontera ha sido todo un éxito.
Muchos se han indignado con este artículo pagado, pues mientras en Venezuela escasean los productos básicos de la canasta familiar, el gobierno paga páginas de publicidad en el diario más importante de Estados Unidos que cuesta por lo menos 100.000 dólares, según fuentes cercanas a la prensa estadounidense.
De acuerdo con el texto, unos 150.000 colombianos migran hacia Venezuela anualmente en busca de mejores oportunidades. El publirreportaje reitera lo que Maduro le expuso al secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon: que el éxodo de colombianos hacia Venezuela debería parar.
Algunos de estos argumentos podrían ser ciertos, pero no menos cierto es que el gobierno colombiano ha mostrado su disposición para que los dos países solucionen los problemas en la frontera. Paradójicamente ha sido el gobierno del vecino país el que ha mostrado hostilidad a la hora de concretar alguna reunión donde se puedan superar estos problemas.
Lo curioso es que en este aviso Maduro se concentra en los problemas que ha tenido Colombia durante 50 años. Seguramente con eso intenta minimizar la gravedad de la situación que atraviesa Venezuela, un país con las mayores reservas de petróleo del mundo que, sin embargo, tiene uno de los peores panoramas económicos: la inflación más alta del planeta, prolongada recesión, desabastecimiento de productos esenciales y un desorden cambiario originado por tres tasas de cambio.
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